El Camino se inicia en el Faro de Corrubedo, frente a un impresionante paisaje marítimo no muy distinto al que, hace dos mil años, pudo recibir a la barca apostólica. Esta primera etapa recorre buena parte del Parque Natural de las Dunas de Corrubedo y Lagunas de Carregal y Vixán, uno de los espacios de mayor interés, por su biología y paisaje, de Galicia. El peregrino visita primero la villa marinera de Corrubedo y se dirige después, rodeando el Monte Facho, a la iglesia parroquial de Olveira, siguiendo luego por las localidades de Bretal y Sirves, para alcanzar algo más allá el Parque Natural.

A partir de ese momento, el peregrino se sumerge, a través de senderos especialmente habilitados en el espacio natural, admirando la célebre duna móvil (la más grande del noroeste peninsular) y las marismas de O Carregal, de aguas salobres. A lo lejos, el mar abierto. El tramo final de la primera etapa devuelve al peregrino al duro asfalto y lo conduce a una sencilla edificación, la Capilla de Nosa Señora de A Guía, ya en la parroquia de Carreira, donde concluye el día.

La huella del Apóstol

En el lugar de Cantón, cerca de la apacible playa de O Prado en Corrubedo, encontramos un conjunto de rocas que guardan uno de los mayores misterios del arte rupestre en el Barbanza. Hablamos de la Piedra de Santiaguiño, un petroglifo con tres extrañas marcas, que representan una espada, una serpiente y un círculo.

A pesar de que los investigadores y estudiosos aún no han logrado traducir su significado, la tradición popular de la zona identifica estas marcas con la huella del caballo del Apóstol Santiago, portando una espada, en el momento de pisar y matar a una serpiente.

La leyenda de Valverde

Según cuenta la leyenda, en la parroquia de Olveira existía hace muchos años una importante villa costera llamada Valverde. La industria de la pesca y el comercio trajeron fortuna y prosperidad a sus habitantes. Sin embargo, con el paso de los años, a medida que aumentaba la riqueza de los vecinos de Valverde, también lo hacía su codicia. El egoísmo y la desconfianza provocaron disputas cada vez más serias, y el descontento general fue aprovechado por un alcalde tirano para enriquecerse a costa de sus conciudadanos.

La situación se volvió insoportable, y Valverde entró en decadencia. Cierto día, llegó a la villa una mujer cubierta con un manto blanco y cargando con un niño en brazos. La visitante anunciaba una terrible maldición que estaba a punto de asolar al pueblo, como castigo divino por su avaricia. Ignorada y despreciada por el dirigente local, la mujer se marchó buscando refugio en el monte de A Curota. Poco después, se desató una terrible tormenta que inundó la villa, enterrándola bajo montañas de arena, en el lugar que ahora ocupan las dunas de Corrubedo.

Capilla de A Guía

Terminamos la ruta en la Capilla de Nuestra Señora de A Guía, en la parroquia ribeirense de Carreira, muy vinculada a las tradiciones marineras de la zona. Previamente, existía en este lugar una pequeña capilla de monjes mendicantes erigida en el siglo XV, que fue levantada para acoger una figura de la Virgen encontrada por los marineros de la villa en un arenal próximo. En esta ermita, un edificio de líneas sencillas, muros de mampostería y planta rectangular, se celebra la romería más importante de la comarca el lunes siguiente a la Pascua de Pentecostés. Antiguamente, existía la tradición de quemar en el atrio de la capilla las embarcaciones antiguas para bendecir las nuevas, antes de echarlas al mar.

En este lugar lleno de historia y simbolismo damos por finalizada la primera etapa del Camino A Orixe.